En uno de los barrios más tradicionales de la ciudad de Tel Aviv, el dueño de una antigua casa de restauración de muebles lucha por mantener su negocio en pie. Su situación se complica al morir su socio. Su hijo pretende entonces cerrar el local que su padre ha trabajado por años con esfuerzo sosteniendo una actividad que conlleva tradiciones, para convertirlo en una actividad que genere más dinero. Ahí se da una discrepancia entre padre e hijo, debido a la visión de la tradición y costumbre del padre y la visión económica y comercial del hijo. Por otra parte el padre empieza a pensar más en la muerte.

El director Yossi Madmoni recibió por esta cinta el premio al mejor guión en la categoría de película extranjera en el Festival de Sundance. Una película israelí que trata más sobre el estado interno de sus personajes que el estado del país. 

Buenos días, señor Fidelman, es el tipo de historia a pequeña escala y bien elaborada que solía ser un elemento básico del cine europeo y rara vez se ve hoy en día, al menos en los Estados Unidos.

Una potente fórmula en manos de excelentes actores y un director como Yossi Madmon y que sabe cómo construir lentamente una historia con pequeños trazos y detalles. La iluminación al estilo de la vieja escuela del cinematógrafo Boaz Yehonatan refleja de manera efectiva el tono oscuro y melancólico. En última instancia, el film trata más de la propia restauración personal del señor Fidelman que de la restauración, en este caso de un piano. La historia se siente tan real que se puede imaginar cómo continúa, una vez que la película ha terminado. La vida continúa.

Disfrute esta maravillosa película este viernes a las 7:00 p.m. Inscribase en el link adjunto.

Link de entrada al cine en ZOOM:

https://udecr.zoom.us/meeting/register/tZMvcuivqjwjGdXhssstOb2gxubWxxQKJYS0
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